viernes, diciembre 25, 2009

Nadando en caramelos

Nostalgia es:

Hace mas de un mes que no ando por estos lares..

no por falta de inspiración es solo que el momento no estaba.. o se me escapaba de las manos como el pez en el agua...

La casa en este momento es un caos, unos gritan, otros juegan y creo que dos mas en este momento me hablan.

(no lo se.. a decir verdad no entiendo muy bien lo que dicen)

Algo extraño pero en este momento solo tres cosas están en mi... mi café a base de canela. mi pc y las ganas de gritar con letras algo que el pecho me sofoca!!!!

Que es no lo se... que necesito.... pero quiero solo escribir....

Tengo en la habitación de al lado cuatro cajas llenas de libros.. me llaman, me gritan... solo quiero leer, escribir y gritar con letras que estoy mas feliz que la felicidad nadando en la alberca con niños y caramelos....

miércoles, noviembre 18, 2009

Nostalgia es:

Una mañana te levantas recuerdas lo que son los días...
Te miras estas en el lugar, existes, vives.
Las cosas cambiaron no es el mismo lugar, ni la misma comida,
La habitación no tiene el mismo aroma, la piel ya no es igual.
Pero te miras por fuera y entonces algo te quema…


Es tu ser que te grita y te observa…

Te dice que todo cambio te exige que sueltes la cuerda…
La caída es libre y el limite la pasión.
Miras a los lados, aprietas tus manos….
El salto ya ha iniciado...
(Buen viaje… suerte)

martes, noviembre 10, 2009

La mente es creativa.

Nostalgia es:

Un día en la tierra natal de Florencia, el señor Manuel le comentaba su teoría de vida en la que el aseguraba morir solo. Decía:
“Yo no me veo morir con una esposa o rodeado de nietos.”

Manuel un tipo de aproximadamente unos 45 años, amable siempre con una sonrisa, alegre, gusta de silbar en los pasillos y considerados por muchos un hombre falto de pasión (nada más falso), además le gusta contar chistes y siempre saluda de mano. Apretando fuerte y con una sonrisa que por lo general invita a darle un abrazo.
Además pienso que Manuel, tenia al menos 5 0 6 hijos con diferentes mujeres, puesto que jamás recibía llamada de algún hijo u esposa habitual.
Le gusta leer cosa que al resto de los empleados en el área no le es muy grato a menos que tenga técnicas para incrementar ventas, por ello era fácil y entretenida las platicas entre Florencia y el. No era el mejor vendedor pero sí el más honesto y simpático del lugar.

Era común ver a Florencia y a Manuel sentados en un pasillo del jardín, siempre ligeros y por lo general en un ataque de risas que al resto solo le podía generar descontento ya sea por pensar que era de ellos o bien por querer hacerlo pero temiendo bajar sus ventas del día. Aun así Florencia y Manuel siempre se saben el tiempo para hablar de casi todo pero con humor:
*Ventas
*Amigos
*Comida
*Libros
*Poesía
*Amores y ocasionalmente Ventas.
Un día Manuel a quien Florencia casi desde que llego aprecio, le decía en una de esas charlas después del respectivo chiste del día. Él le decía que el cerebro es tan increíble que hace que recordemos tanto el pasado que parece doler, pero es tan poderoso que puede lograr que situaciones que jamás existieron. Esas situaciones pueden ser producto de un desamor, una ilusión o tan solo una necesidad que el alma opaca y reproduce en una memoria falsa.
Ese día Florencia y Manuel hablaban de envejecer, del miedo a morir solos, del valor de la pareja, pero del importante valor de los amigos.
En ese tono es donde surge la interrogante de ¿si amamos o nos amaron?
De si llegaremos a amar de manera intensa como los poetas en sus libros, o las mentes creativas en las películas. La discusión era en torno a si alguna vez Florencia o Manuel habían sentido la sangre quemar, o el corazón desfallecer por alguna persona, nombre o beso. Se preguntaban si alguna persona había logrado mover en ellos las fibras del ser. Si el recuerdo que en ese momento parecía ser dolor era real, o solo un reflujo de esa memoria falsa de gente que ni siquiera existe puesto que es la necesidad de creer la que les dé cualidades que no existen.

Manuel un caballero que poco dice de forma clara de su vida personal, pero que si se tiene la mente alerta uno puede escuchar a través de sus ojos, sus manos y sus movimientos corporales, o incluso en el desayuno. Suele tener los mejores consejos o de no serlos al menos los que se necesitan escuchar en ese momento para quitar el micrófono a la falsa memoria.
Ese día Florencia tenía ese sabor a té de menta en los labios.
¿Cómo es el sabor?
Simple: Fresco, con ganas de mas, pero solitario.

Nadie mejor que Manuel, para conversar, mirada suave, sentido protector, amigo leal, ante todo un caballero, siempre con un abrazo desinteresado, una sonrisa tibia, una mano que te dice: Todo estará mejor te tienes a ti.
Manuel es por mucho el mejor bono que el empleo de ventas pudo dar a Florencia.
En otra ocasión y con una taza de café con canela hablaremos más de Manuel.




martes, noviembre 03, 2009

Monedas

Nostalgia es:

En nuestros días tenemos gente.

En los bolsillos tenemos monedas, algunas son para comprar aquello que nos mantiene en vida.



Otras son solo monedas…



Unas mas son el cambio de un producto que asumíamos comprar, pero jamás tuvimos...

Entonces reviso el bolsillo y esa moneda resultado de la pieza que a insustancial placer pensaba adquirir. Y ahora que la observo con mesura presenta un valor diferente.

No es la moneda más pura, tampoco la de mayor valor, pero ahora entre la morralla del bolsillo parece que su luz fuera la que envuelve.

La mente es absurda y es entonces que la moneda parece tener más denominación que nunca.

Entonces en un momento el producto que de inicio era como un capricho como un adorno que uno piensa no necesitar, se convierte en algo como el café de la mañana. Sabes que puede hacer daño pero necesitas el sabor de ello para solo dar inicio al día. No lo bebes por fanatismo o para calmar un ataque instintivo de ansiedad, es su sabor lo que es grato.


Uno regresa a la otra orilla, mira el bolsillo. Observa las monedas, se da cuenta que el cambio de lo trivial pudo dar más experiencia que el peso que representa cargarlo en la memoria.

domingo, noviembre 01, 2009

Florencia y Dominic

Nostalgia es: Florencia y Dominic.


¿En qué medida se encuentra la cordura?
¿En que mano se toma la rienda?

Hace un par de días que la mente de Florencia no deja de taladrar el nombre de Dominic.
¿Es que acaso la obsesión sabe a enojo?

Desde ese día:

Florencia procura no mirar por las baldosas del día en que con ardiente deseo miro llegar a Dominic, quien a estas alturas pare ya ser más un retazo de manta sobre el que Florencia no quiere dejar de pintar.

Dominic entonces gallardo y airoso aquel día, experto en artes y gusta de fotografía, capto de Florencia los mejores momentos, la risa, al manos, los besos y dejo para el postre aquello que llamaremos sexo.

Para Dominic la vida hasta hoy está llena de excesos y su temor más fuerte: La serenidad.
Como no. Si ella indudablemente lo llevara a sí mismo... Florencia en cambio no se da ni por enterada que la serenidad llego y está instalada en la habitación, la mira, le habla pero Florencia parafrasea diciendo que es nostalgia.

Entre tanto Dominic, no es más que la sombra de lo que se llama Libertinaje. Florencia mira a la alcoba es pequeña y está ahora tan llena de serenidad, que ella prefiere mirar por el balcón y ver a Dominic: su piel, sus ojos, sus manos… las manos.

Pero es entonces que Dominic no deja que Florencia escuche a la serenidad, le llama, le dice y le escribe que lo que por el balcón mira no es más que la prueba de que por dentro aquello le quema.

Florencia entonces se apresura toma en una mano el bolso y con la otra recoge las telas de su vestido que arrastran por los mosaicos de aquella casa. Dominic tiene ese rostro que parece gritar tener todo resuelto, nada más falso que eso.

No es entonces que Florencia sea ingenua, ni que Dominic sea cruel.

Es tan solo el fantasma de lo que ella desea, lo que añora que con arrebato llegue, la estúpida fantasía de aquello que la serenidad le decía: No esperes, no existe.

Florencia entonces guarda los consejos y mete al cajón los malos recuerdos. Vuelve a mirar a Dominc nada más airoso que aquel caballero.

Dominic viste entonces, un pantalón color gris, camisa color crema, tirantes al tono y un reloj de cuerda con el que juega en las manos y con soltura guarda en el bolsillo.

(No he podido citar que las letras de Dominic parecieren telarañas de campo. )

Florencia parece dejarse seducir por ellas.

Florencia no escucha y no entiende. Dominic no es perverso es solo el reflujo de su pasado que lo baña en la enorme necesidad de saciar el ego. (Pero ya detallaremos después esto) Florencia no es más que eso... Flor que se mira y con vehemencia ansia tenerse.

El encuentro está pactado entre Florencia y Dominic.

Los padres de Florencia imaginan que esa tarde ella salga a sus lecciones de piano.

Entre tanto Dominic armado de ese toque galante y la actitud de caballero que solo los libros y una buena memoria de las letras que de ellos ha comido, ha citado verla tras el jardín de la iglesia.
F

Florencia a puesto en su cuello el doble de fragancia teme no ser tan bella como Dominic imagina y ha olvidado lo que de ella impacta.

Olvido el carisma…


Dominic tiene entre manos, un par de estrategias nada armado, solo mira en su billetera las fotos de lo que ha conquistado.

Se pregunta si esto es como esas notas que tan celosamente guarda en su billetera, se pregunta si costara más trabajo. Pero lo que no imagina es que en los adentros de su ser lo que a Dominic le pasa se llama miedo...


Podría gustarle o confirmar que no es más que el vomito de su libertina vida, que en un grito desesperado le recuerda que las cosas no solo con un tónico y un tratamiento se erradican.


Lo que Dominic quiere no darse cuenta necesitar, se llama valor...


Algo que Dominic parece haber olvidado en los últimos años.

15 minutos faltan para el encuentro


No serán ya mas cartas, o mensajes que con la servidumbre se envíen.

Serán sus caras, serán los cuerpos que en cartas han deseado tanto, serán los labios que no han dejado querer tener uno del otro, será la oportunidad de saber el olor de Dominic, será la ocasión de poder tener de cerca el cuerpo de Florencia...


Solo faltan 15 minutos ya...

Lo que ese día paso lo contare en otro fragmento.


(Ahora el Tango me reclama su atención... Salud.)

jueves, octubre 29, 2009

Nostalgia es:

No es mio... de hecho... es el producto de un hurto a un tercero... jajaja

Pero puesto que ladron que roba a ladron jajaja.. se los comparto...

EN LA GRAN OSCILACIÓN...

En la gran oscilación
Entre creer y no creer,
El corazón se trastorna
Lleno de nada saber

Y, ajeno a lo que sabía
Por no saber lo que es,
Sólo un instante le cabe
Que es el conocer la fe-

Fe que los astros conocen
Porque es la araña que está
En la tela que ellos tejen,
Y es vida que había ya.

Suave..dulce..
metafórico...romántico
y con la característica
Edu:
Loco....


Hurtado a un paisano pero las gracias son para el tío chavita...
Sin el no Carlos no se hubiera largado a E.U en busca de lo que el llama su amor... La libertad y su música...

Niña Morena

Esto lo escribí hace días.
El de mi cumpleaños para ser mas certera.
Pero lo comparto:
Hace años leí este poema por primera vez... desde ese día es mi icono... mi signo.. mi cara y me encanta jugar a que soy yo....

16 de octubre de 1982...
(que bárbaro así se lee con mas años jajaja!!!)
Bueno la cosa es que ya son 27.. Gracias a Dios por ser mi luz... a mis padres por que aun en medio de su propio miedo me regalaron la vida... a mis hermanos por ser esa chispa.. a mis amigos por ser mis hermanos... a mi pasado por regalarme sonrisas y razgarme las entrañas... A mi cosita hermosa del presente por ser la luz de la habitación..
PERO SOBRE TODO
AGRADEZCO Y BENDIGO A MI HIJO
POR SER EL RAYITO DE LUZ QUE ILUMINA MI SENDERO....

Niña morena y ágil, el sol que hace las frutas, el que cuaja los trigos, el que tuerce las algas, hizo tu cuerpo alegre, tus luminosos ojos y tu boca que tiene la sonrisa del agua. .
Un sol negro y ansioso se te arrolla en las hebras de la negra melena, cuando estiras los brazos.
Tú juegas con el sol como con un estero y él te deja en los ojos dos oscuros remansos. .
Niña morena y ágil, nada hacia ti me acerca.
Todo de ti me aleja, como del mediodía.
Eres la delirante juventud de la abeja, la embriaguez de la ola, la fuerza de la espiga. .
Mi corazón sombrío te busca, sin embargo, y amo tu cuerpo alegre, tu voz suelta y delgada.
Mariposa morena, dulce y definitiva como el trigal y el sol, la amapola y el agua
Siempre he dicho: Educita la eterna enamorada del amor...
(un buen vino y una copa a la ocasion ya son 27,
pero el vino es mejor.)
Niña Morena Agil.. Esa soy yo..

domingo, octubre 25, 2009

Tiene Razon..

Un hombre al que ame desde que lo conocí. Creo por lo efímero de la relación.
dijo:
“Uno puede llorar hasta con la palabra excusado si se tienen ganas”
(Jaime Sabines)
Debo reconocer que la frase me gusto pero nada más cierto que el día de hoy.

Como puede ser uno tan evasivo... Eso dice un ser al que no conozco pero que ocasionalmente
ocupa mi parte pensante del cuerpo…

Hoy no tengo una copa... el vino esta la Nevera... pero estoy sin copa…

(De fondo Alejandro Fernández: Abrázame)

Nostalgia

Nostalgia es:
Llegar al ocaso del día mirar por las baldosas del alma y tener esa pared de retratos...

Hoy me he sentado en la mecedora y he visto los retratos. No quise mirarlos fijos pues la salud no es mi compañera hoy y el tiempo, el tiempo el solo es mi espectador...

Ver cómo te mira una realidad aparte, no es cómodo en momentos lo comparo con ese sentido de ser un muñeco de aparador y entonces dejar de ser un protagonista para ser el antagónico de la obra.

Es parar y darse cuenta que no miras nada. Si no que eres observado por numero de vivencias que no puedes borrar.

(Un suspiro… una pausa)

Regreso a la mecedora. Hago el ceremonial de costumbre, las canciones de frecuencia, las quejas y reproches habituales, miro mi taza y el café tampoco me acompaña ya...

(Un suspiro más, esta vez sin pausa)

La mecedora es fría pero los huesos en este momento aun perplejos por los retratos no pueden sentir mas allá que el eco que ese muro arroja...

(Una pausa, el suspiro no llego)

Entonces recorro uno a uno los retratos. [La mecedora es más fría] y veo como cada uno no es más que un sabor a uva. Entonces creo entender lo que me pasa, pienso que es nostalgia. Nada más que un sabor a uva. Noto entonces el frio de la mecedora pero es el sabor a uva el que predomina.

(Una pausa, un suspiro... un suspiro más)

Un buen vino...las suficientes uvas para tener un buen vino

(¿Será por eso que el café no me acompaña?